De la parte cóncava de una de las hojas carnosas del bulbo de la cebolla y con la ayuda de un bisturí y una pinza fina, separar una pequeña porción de epidermis, procurando no arrancar el tejido subyacente, de tal forma que la parte desprendida tenga el aspecto de una fina película traslúcida como el celofán.
1. Llevar el trozo desprendido a la cubeta o caja de Petri con agua. Apoyar el portaobjeto en el fondo de la caja y ayudándose con la pinza extender el trocito de epidermis de cebolla sobre el porta.
2. Depositar el porta-objetos sobre el soporte de tinciones, añadir unas gotas de azul de metileno, dejando actuar este colorante-fijador durante cinco minutos, procurando añadir más gotas si se evapora.
3. Escurrir el colorante sobrante y lavar, dejando caer agua con un cuentagotas sobre la preparación.
4. Colocar encima de la preparación un cubreobjetos y observar al microscopio, primero a pequeño aumento y luego a un aumento mayor.
Se utilizarán primero los aumentos débiles con el fin de centrar la preparación y determinar la zona mejor para la visualización. Cambiar después a un aumento mayor.
